Es un equipo que se instala en la entrada del agua de su domicilio y que funciona con resinas y sal de forma automatica, para ablandar la excesiva dureza del agua, principalmente producida por la cal, que incide sobre nuestra vida diaria; nuestra piel se irrita, o pica, nuestra ropa no queda suave. Pero además, también electrodomésticos y grifos reducen su vida útil e incrementan los gastos de su mantenimiento reparaciones o rotura.
Hoy en día, disponer de un descalcificador es aconsejable en todos los hogares. Porque no solo protege los electrodomésticos ante la cal, sino que obtiene el agua blanda, con la que lavar ropa, el pelo y nuestra propia piel.
Este agua está especialmente recomendada para la higiene, puesto que ayuda a evitar o reducir los picores en la piel, producidos por el exceso de cal.
Menor mantenimiento y más vida útil para electrodomésticos, calderas, tuberías, calentadores y conducciones en general.
Eliminar al 100% los gastos destinados a productos antical, de belleza y de limpieza es solo una de las maneras de ahorrar con los descalcificadores.
También protege las prendas, ayudando a mantener su color y suavidad original.